La decisión tiene un impacto de unos u$s300 millones anuales en los ingresos de las empresas.
La medida, detallaron fuentes oficiales a Ámbito, es una iniciativa del ministro Matías Kulfas que está a la firma del Secretario de Energía y alcanza a la generación vieja o spot, comprendida en la Resolución 1 que recibe una remuneración definida por la autoridad de aplicación.
Entre 2015 y 2018 esa remuneración aumentó un 60%, a partir de una decisión del gobierno de Mauricio Macri.
La generación de las centrales hidroeléctricas binacionales se pesifica pero no se reduce su remuneración.
La medida será de aplicación para las transacciones correspondientes a febrero 2020. La resolución 1 fijaba para 2019 un desembolso de 1.344 millones, la nueva propone 1.026. Es una reducción de 318 millones, casi el 24% en promedio.