Pollicita aclaró que ello se resuelve “sin perjuicio de la responsabilidad penal que eventualmente les pueda corresponder a otros funcionarios y empleados del Banco Nación, funcionarios de distintos organismos del Estado Nacional e integrantes del grupo Vicentín”.
“Se desprende de la denuncia la posible existencia de una maniobra por la cual se habría perjudicado al Estado Nacional a través del otorgamiento irregular de préstamos por parte del Banco de la Nación Argentina a favor de la firma Vicentín S.A.”, sostuvo el fiscal.
Esta situación “permitió a la empresa acumular una deuda con el banco de 18.500 millones de pesos, los cuales actualmente serían de cobro incierto puesto que la sociedad se encuentra en estado de cesación de pagos”.
En el dictamen, se explica que Vicentin “se aboca esencialmente al rubro de los cereales y oleaginosas”, pero además “tiene inversiones en distintas actividades como la producción de biodisel, algodón, ganadería, hilandería, etc., ubicándose entre las primeras empresas del país como consecuencia de un notable crecimiento que habría verificado entre los años 2015 y 2018”.
La investigación está a cargo del juez federal Julián Ercolini, a quien el fiscal pidió medidas de prueba.
Entre estas pruebas, según el dictamen, se requirió al juez que pida al Banco Nación copias certificadas de los “expedientes a través de los cuales tramitaron los préstamos solicitados por parte de la firma y del legajo del referido cliente, desde el año 2015 a la actualidad”.
También se solicitó que elabore un informe sobre el monto de la deuda, su composición, fecha de cada préstamo, cuotas canceladas, vencidas o no abonadas y garantías entregadas por la empresa, entre otros puntos.
Además solicitó que se convoque a declarar como testigo al actual director del banco, Claudio Lozano, y que aporte una copia certificada del “Primer Informe de Situación de la firma Vicentin”.
El lunes último, la empresa Vicentin solicitó la apertura de su concurso preventivo de acreedores, tras la cesación de pagos en la que cayó en diciembre último, cuando no pudo hacer frente a deudas con proveedores por 350 millones de dólares y postergó esos pagos.