La CEO de Eramet visitó la Argentina para la inauguración de la primera planta de litio en Salta; estimó que tendrá un impacto financiero de US$3000 millones en los próximos 20 años; y vaticinó la construcción de otras dos plantas, condicionadas al RIGI.

La ejecutiva de origen francés visitó el país en el marco de lo que definió como “un paso clave para la empresa”, en línea con un reposicionamiento estratégico impulsado desde el arranque de su gestión. “Éramos muy fuertes en níquel, arenas y metales, que contribuyen al desarrollo de la economía en todo el mundo, pero descubrí que teníamos potencial para participar en la transición energética y pusimos como prioridad el litio. Así, ahora nos convertimos en la primera empresa europea en producir litio a escala industrial”, remarcó.

, la compañía cortó las cintas de la primera planta que comenzará a producir carbonato de litio en la provincia de Salta -la cuarta en el país-. La misma es operada por Eramine Sudamérica, firma creada por Eramet (50,1%) y por la siderúrgica china Tsingshan (49,9%),

El proyecto está ubicado a 4000 metros de altura en la zona del salar Centenario Ratones, perteneciente al departamento de Los Andes. El mismo está emplazado a 75 kilómetros de la comunidad de Santa Rosa de los Pastos Grandes, conformada por alrededor de 300 habitantes, en las cercanías de San Antonio de los Cobres.

“Esta es una planta técnica, porque abarca desde la extracción hasta la disposición de un producto final sofisticado, que será directamente destinado a la fabricación de baterías”, explicó Boris. Tras la puesta en servicio, la firma prevé iniciar la producción en noviembre, mientras que para 2025 y hacia el final de su curva de crecimiento, apunta a escalar a 24.000 toneladas al año. La planta, cuya producción será destinada 100% a la exportación y será absorbida por sus mismos accionistas, tiene una vida útil proyectada de 40 años.

La nueva planta de Eramine Sudamérica se diferencia de las otras tres instaladas en el país por su proceso productivo: el mismo está basado en el método de extracción directa, que le permite alcanzar un rendimiento superior al 90%. En tanto, los proyectos convencionales están basados en la utilización de piletas para la evaporación en la salmuera, con un rendimiento que gira en torno del 40% y del 60%.

Actualmente, el mapa del litio en la Argentina incluye a otras dos plantas en producción en Jujuy: uno en el Salar de Olaroz, operado por Arcadium Lithium (firma creada este año tras la fusión de la estadounidense Livent y la australiana Allkem); y otra en Cauchari-Olaroz, de la minera Exar, una compañía argentina conformada por Ganfeng Lithium, Lithium Argentina y Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado. Y a estas se suma una tercera en Catamarca, en el Salar del Hombre Muerto, operado también por Arcadium Lithium. Además, de acuerdo con datos del Ministerio de Economía con corte a diciembre de 2023, hay un total de 49 proyectos de extracción de litio en el país.

De acuerdo con datos de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), la Argentina es el segundo país con mayores recursos de litio y el cuarto productor mundial después de Australia, China y Chile. A su vez, a pesar de la baja en el precio del litio registrada desde diciembre del año pasado, desde el sector sostienen perspectivas positivas y proyectan inversiones por más de US$5000 millones en los próximos años.