El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció este lunes públicamente su decisión de convocar a elecciones locales en la misma fecha que las nacionales pero con un sistema de votación diferente, el de boleta única electrónica, lo que profundizó los contrapuntos y diferencias internas en Juntos por el Cambio, desde donde dirigentes como Mauricio Macri, María Eugenia Vidal y Patricia Bullrich, entre otros, salieron a cuestionar duramente la medida.
Con esta iniciativa que anunció este lunes, Larreta contradijo expresamente lo que había sugerido el expresidente Mauricio Macri, al mismo tiempo que dio un guiño político hacia el senador Martín Lousteau, uno de sus principales aliados en el distrito.
A través de un video subido a sus redes, Larreta hizo el anuncio este mediodía, en una decisión que fue duramente criticada por el propio Macri (habló de “profunda desilusión”) y que implica que para jefe de Gobierno y legisladores los votantes de CABA utilizarán en la misma jornada que las PASO una boleta única electrónica distinta a la papeleta sábana de las categorías nacionales, lo que se conoce como una elección “concurrente”.
“Hoy quiero contarles que tomé la decisión de que los porteños votemos el mismo día que se vota en las elecciones nacionales. O sea, el 13 de agosto las PASO, el 22 de octubre las generales y el 19 de noviembre el balotaje, si lo hubiese“, indicó Larreta.
“Esto evita que los porteños tengamos que ir a votar hasta seis veces en el año. Nos ahorra mucho tiempo y nos evita gastos innecesarios”, argumentó el mandatario porteño.
Y añadió: “Lo vamos a hacer con boleta única electrónica, que es un sistema más ágil, más sencillo, más transparente y es una bandera del PRO que inició Mauricio en la Ciudad en el 2015 y que también promovimos junto a todos Juntos por el Cambio a nivel nacional”.
El jefe de gobierno agregó que “la boleta electrónica, además, nos permite que la discusión de las propuestas y los proyectos de cada candidato se enfoque en los vecinos y en las oportunidades de cada barrio de la Ciudad”.
“Voy a apoyar a un candidato de mi partido, que es el PRO. En las próximas semanas vamos a estar trabajando para definir cuál es el mejor candidato para seguir con todas las transformaciones que empezamos con Mauricio y que continuamos hasta hoy”, finalizó.
Según la ley electoral, Larreta debía definir esta semana cuándo y cómo votarían los porteños para elegir autoridades municipales, una decisión que por ley debe concretarse 120 días antes de la realización de los comicios.
El jefe de gobierno eligió en este sentido que los porteños voten sus representantes locales o municipales el mismo día en que se elegirán las autoridades nacionales (13 de agosto para las PASO, 22 de octubre las generales y 19 de noviembre un eventual balotaje).
Sin embargo, se tratará de una elección denominada “concurrente“: en este caso, los porteños usarán en un mismo cuarto oscuro la boleta sábana o tradicional para elegir candidatos a presidente y vice y a legisladores nacionales, por un lado, y una boleta única electrónica para elegir jefe de Gobierno y legisladores municipales.
En el plano político, la decisión de Larreta contraría los deseos de Mauricio Macri y de la que asoma como su precandidata presidencial preferida, Patricia Bullrich, quienes pedían que en la Ciudad se votara con boleta sábana en todas las categorías.
Esta opción también era avalada por Jorge Macri, uno de los precandidatos del PRO para la sucesión de Larreta, y quien seguramente encarne la postulación del partido amarillo para la Ciudad.
El PRO ya definió que presentará como candidato a Jefe de Gobierno a un solo postulante, y esto implica que en los próximos días declinarían sus postulaciones los ministros Fernán Quirós (Salud) y Soledad Acuña (Educación).
En este contexto, en JxC se presentarán a las PASO para suceder a Larreta tanto Jorge Macri, quien casi con seguridad será el postulante del PRO, y el senador radical por el distrito, Martín Lousteau.
Mientras Jorge Macri venía pidiendo que no se cambie el sistema de votación y que se vote con la boleta tradicional o sábana, Lousteau reclamaba en sentido opuesto que se realicen elecciones concurrentes, tanto con boleta única de papel, opción que fue descartada, como con boleta única electrónica, que fue el método finalmente elegido por Larreta.
La decisión de Larreta implica un guiño indisimulable hacia Lousteau, quien consideraba que con el sistema de lista sábana tenía mejores chances electorales frente a Jorge Macri, quien se hubiera visto beneficiado por el arrastre de las boletas presidenciales, tanto de Larreta como de Bullrich.
Al optar por esta alternativa, y en el marco de su estrategia presidencial, Larreta decide tender puentes hacia el radicalismo, buscando una alianza de centro que le de más músculo político a su propia candidatura rumbo a la Casa Rosada.
La Ciudad de Buenos Aires ya había usado el sistema de boleta única electrónica en el año 2015, mientras que en 2019 se había votado con boleta sábana o tradicional.
El argumento esgrimido por el larretismo para defender la decisión es que el Código Electoral de la Ciudad, que establece la boleta única, fue votado en 2018 y entró en vigencia en 2020, según explicó esta mañana el vicepresidente de la Legislatura porteña, Emmanuel Ferrario.
Tras el anuncio de Larreta, la diputada nacional María Eugenia Vidal salió a cuestionarlo en términos duros, al hacer referencia a las “ambiciones personales”, y además puso el foco en que se están cambiando las reglas acerca de cómo ejercer el voto en pleno año electoral.
“El PRO y el JxC que le prometimos a los argentinos no es éste”, cuestionó Vidal por Twitter y en esa línea advirtió: “No hay ambición personal que pueda estar por encima de nuestros valores y del equipo”.
“Somos el cambio o no somos nada”, remató la exgobernadora bonaerense.
Por su parte, el propio Macri posteó en la misma red social: “Coincido con María Eugenia. Qué profunda desilusión”.
Antes del anuncio de Larreta, Macri también había apuntado que modificar la forma de votación implicaba “más gasto del Estado, más filas, más tiempo, dos urnas y boletas”.
En cambio, el titular del radicalismo y precandidato presidencial de ese partido, Gerardo Morales, manifestó su apoyo a la medida tomada por Larreta porque, dijo, “la boleta única electrónica beneficia a los ciudadanos de CABA, garantiza transparencia y respeta el Código Electoral”.
Lo dispuesto por Larreta también obtuvo el respaldo de la Coalición Cívica, desde donde defendieron el método de votación elegido por el jefe de gobierno al sostener que “cumplir con lo que dispone nuestro ordenamiento jurídico no es cambiar las reglas de juego como interpretan algunos actores políticos”.
“Por el contrario, se trata de cumplir con las normas electorales que nos rigen”, agregó el partido fundado por Elisa Carrió a través de un comunicado.
Y añadieron: “Llegó la hora de honrar a nuestro electorado con la boleta única y que podamos así elegir sin condicionamientos a nuestro próximo Jefe de Gobierno. Esto puede hacerse en forma concurrente con la elección de Presidente de la Nación”.
En paralelo, el diputado nacional Ricardo López Murphy, quien también aspira a ser jefe de Gobierno y está enrolado políticamente con Bullrich, dijo que esta decisión hará crecer a su espacio y vaticinó que la Ciudad de Buenos Aires “se va a convertir en la Ciudad de la Libertad”.
Además, manifestó que Republicanos Unidos lo hará “compitiendo contra quien haya que competir y con las reglas de juego que elijan inventar”, en un cuestionamiento implícito a la decisión de Larreta