Ante la solicitud de los Centros de Estudiantes de la UNSa, el pasado lunes se reunió el Consejo Superior de la casa de estudios y dictaminó un rechazo hacia la resolución N°13/2024 de la Autoridad Metropolitana de Transporte que estableció restricciones al boleto gratuito.

Asimismo, los consejeros definieron que el Rectorado de la Universidad solo entregará a SAETA los padrones acordados en el convenio vigente, divididos entre estudiantes ingresantes y estudiantes regulares. El convenio actual no prevé la entrega de datos académicos de los estudiantes, y en la sesión se remarcó que esos datos (como cantidad de materias aprobadas o cursadas actualmente) son confidenciales y personales. También, encomendaron a las autoridades universitarias a gestionar una mesa de diálogo con autoridades provinciales e instruyeron a la Secretaría de Asuntos Jurídicos a estudiar y analizar el inicio de acciones legales.

A lo largo de la reunión, el secretario de Asuntos Juridicos, Sebastián Aguirre Astigueta, indicó al cuerpo que existe la posibilidad de presentar un amparo judicial, fundamentado en la Ley de Protección de Datos Personales 25.326, contra el reglamento de AMT; y, por otro lado, pueden avanzar en una denuncia por incumplimiento del convenio entre SAETA y la universidad a través de la Justicia Federal. El convenio, firmado a fines del año pasado, no estipuló en ningún momento las restricciones ni se aceptó el envío de información académica adicional de cada estudiante. Ante la situación y el pedido de los estudiantes, el Consejo Superior se declaró en Sesión Permanente para accionar de forma inmediata con cualquier novedad que surja respecto al tema.

Podrían avanzar en el área legal

En el marco de la reunión del Consejo Superior agregaron que las restricciones implementadas no están sustentadas en estudios fehacientes o análisis de datos públicos ni fueron consultadas a la Universidad, “desconociendo totalmente la actividad académica que imparte la misma”. Elías Riveros Ale, consejero superior estudiantil de la Facultad de Humanidades, expresó a Nuevo Diario la importancia de contar con el apoyo institucional por parte de la Universidad hacia los estudiantes. “La medida también remarca la vigencia del convenio, firmado el 5 de diciembre del 2023, en donde establece que las restricciones de la AMT y SAETA van en contra de este convenio, y reglamenta también ya la posibilidad de avanzar en asuntos legales”, dijo. Remarcó la importancia de no retroceder en los derechos adquiridos de los estudiantes, que costaron años de lucha de generaciones anteriores, y evitar la deserción de los jóvenes que ingresan a la educación superior.