Al rezar el tradicional Ángelus desde el Vaticano, el Papa negó que la fe se pueda separar de “la vida de todos los días”. “No. Esto es una esquizofrenia, como si la fe no tuviera nada que ver con la vida concreta, con los desafíos de la sociedad, con la justicia social, con la política y etcétera”, sostuvo.

El papa Francisco consideró este domingo que es una “esquizofrenia” separar la fe “de la justicia social y la política” y animó a los habitantes del mundo a ser “ciudadanos responsables” que devuelvan lo que la sociedad ofrece a través del compromiso por el bien común y el pago de impuestos.

“Jesús quiere ayudarnos a colocar al César y a Dios cada uno en su importancia. Al César, es decir, a la política, a las instituciones civiles, a los procesos sociales y económicos, pertenece el cuidado del orden terrenal de la polis”, planteó el pontífice al rezar el tradicional Ángelus desde el Vaticano.

“Y nosotros, que en esta realidad estamos inmersos, debemos restituir a la sociedad lo que nos ofrece a través de nuestra contribución de ciudadanos responsables, prestando atención a lo que se nos confía, promoviendo el derecho y la justicia en el mundo del trabajo, pagando honestamente los impuestos, comprometiéndonos por el bien común y etcétera”, agregó luego.

En su catequésis, Francisco negó además que la fe se pueda separar de “la vida de todos los días”.

“No. Esto es una esquizofrenia, como si la fe no tuviera nada que ver con la vida concreta, con los desafíos de la sociedad, con la justicia social, con la política y etcétera”, sostuvo.

El mensaje del Papa se basó en un pasaje bíblico con palabras de Jesús sobre el pago de impuestos que, planteó, “se han convertido en algo de uso común, pero a veces se han utilizado de manera equivocada, o al menos reductiva, para hablar de las relaciones entre Iglesia y Estado, entre cristianos y política”.

Para el Papa, los dichos “a menudo se entienden como si Jesús quisiera separar a César y a Dios, es decir, la realidad terrenal de la espiritual”.