Un fuerte operativo de control policial se desplegó durante las celebraciones que iniciaron el viernes con el Triduo y acentuaron este domingo con la llegada de peregrinos. Por la tarde continuaron las misas y este lunes y martes habrá celebraciones de acción de gracias en el Santuario.

En su homilía, monseñor Cargnello señaló que “el Señor del Sumalao se ha quedado en estas tierras, y son tierras de unidad de los pueblos. Acá se traían las mulas que venían desde La Pampa para venderle a la gente que llegando desde las minas de Potosí compraban carne y traían productos del Alto Perú. Acá el señor ha querido quedarse y mostrar a través de este cuadro su imagen de un Dios que sigue reuniendo. Ya no por motivos económicos de intercambio, sino desde el corazón. La unidad no es el primer lugar, es un regalo de Dios”.

Habló sobre la unidad de la familia, de los pueblos y de la iglesia. “Uno lo ve en las familias, cuando son jóvenes y están enamorados, las cosas van bien. Pero después hay que aprender a convivir y hay momentos altos y bajos, al entusiasmo tiene que seguirle la paciencia, la escucha, la perseverancia, tolerancia.  Muchas veces se siente que las cosas no andan, ahí se descubre que la Unidad es Dios, la unidad de la familia, la unidad de los pueblos y de la iglesia es un regalo de Dios y hay que pedirlo”, dijo.

Por último, dijo “después de lo que hemos vivido, con sus consecuencias de dolor, debilidades y fragilidades que han surgido. El señor dice yo voy a trabajar por vos, pero dame una mano vos también, poné tu corazón y disposición para volver a tu casa y convertirte en alguien que construya la unidad en tu familia, la paz de tu hogar y la salud espiritual que ayuda a la salud física. Para que haya paz es necesario que haya unión”.

Fuente Nuevo Diario