El gobernador Gustavo Sáenz y el presidente Alberto Fernández presidieron los homenajes al General Martín Miguel de Güemes en el Bicentenario de su paso a la inmortalidad.
Las ceremonias iniciaron con el arribo de las autoridades a la Catedral Basílica de Salta, para homenajear al héroe nacional en el Panteón de las Glorias del Norte, donde descansan los restos de Güemes y luego se trasladaron al Monumento para presidir los actos centrales.
Allí el Gobernador repasó la gesta y vida de Güemes, destacando que “amó profundamente a Salta, y ofrendó su vida por ella. Estuvo silenciado casi noventa años, aunque su nombre tenía voz y resonaba con ardor en la memoria popular”.
Los Infernales acompañaron el desarrollo del acto.

Dijo que “el pueblo nunca olvidó a Martín Güemes, y generación tras generación fue agrandándose su figura y mantenida viva esa llama interior, que permaneció encendida en el alma mineral de los cerros y en la fronda de los árboles del monte”.

Prosiguió: “Güemes no supo de descansos, ni de pausas. Tuvo que dividirse entre la política y la guerra. Debió soportar enemigos irreconciliables que pretendieron tumbarlo, y tener simultáneamente el coraje de levantarse, sin postrarse jamás, para llevar adelante sus ideales”.

Sáenz destacó que “los grandes desafíos que debemos superar en estos tiempos imponen a los gobernantes, a las instituciones y a los ciudadanos abrevar en los ejemplos heroicos de su pasado glorioso, tan necesarios para nuestro porvenir. Y Güemes viene a proveernos de ellos. Él es inspirador e inspiración a la vez. Su ejemplo es el norte al que debemos mirar para seguir en la dirección correcta que nos conduzca a una sociedad más justa, más digna, más humana”.

Por su parte el Presidente reseñó “el trabajo de Güemes que no fue solo gestar la independencia argentina, Güemes fue un hombre importante, murió acompañado por su pueblo. Para nosotros los próceres fueron los son capaces de construir esta patria, los que la fundaron, dieron su vida para que seamos libres, esos hombres y mujeres dejaron enseñanza que perduran en el tiempo, hasta el día de hoy sus enseñanzas nos motivan, en momentos como estos tan difíciles y complejos donde la enfermedad y la muerte nos acechan”.

Añadió Fernández que “nuestra templanza debe recomponerse recordando lo que nuestros patriotas hicieron porque hacer es patria, es ser generoso con el otro, ser patriota es defender nuestra tierra con toda diversidad, es entender que cuando no estamos unidos solo el malestar la pena y la angustia termina ganándonos”.

Además rememoró que Güemes al morir se hizo prometer a sus tenientes que no se salieran de su lucha, por ello: “Hoy es un día propicio a 200 años de su muerte para que yo le jure al general que en medio de la pandemia que voy a trabajar incasablemente para que la salud de cada argentino este preservada. Para que le jure que su muerte no fue en vano y que voy a trabajar para construir un país federal donde el norte no se aun norte olvidado, donde no haya un país central y una Argentina periférica.

Fernández le juró al General que “voy a trabajar con los 24 gobernadores del país porque es lo que el imperativo de este tiempo me impone y lo que la argentina me reclama. Quiero decirle al General que voy a trabajar que rápidamente nos vacunemos todos, para que cada argentino deje de vivir con el miedo de este virus, quiero decirle al general que voy a trabajar incansablemente por la unidad de todos nosotros. No es tiempo de perder tiempo ni de disputas, es tiempo de unir esfuerzos y construir el país que nos debemos”.