El precio de la carne, el arrastre del descongelamiento de Precios Máximos y servicios regulados y, los aumentos en la nafta son algunos de los motivos que llevan a las consultoras a sostener que la inflación de marzo tendrá un piso de 3,5 %, pero según los analistas consultados por El Cronista se ubicará en torno al 4% o levemente por encima.
En términos acumulados, hasta la tercera semana de marzo las gaseosas son lo que más aumentaron, aproximadamente un 10%, el cacao y sus derivados un 6,7%, las bebidas alcohólicas un 6,2%, golosinas y especias un 6%. Al mismo tiempo, la carne registra aumentos en torno al 5% y se espera entre esta semana y la próxima se siga trasladando a los mostradores porque la semana pasada en el mercado de Liniers aumentó un 9%.
“En las últimas semanas observamos variaciones por encima del promedio en aquellas categorías que fueron deslistadas de Precios Máximos en noviembre y en enero“, sostuvo Sofía Milagros Suardi, economista de la consultora Eco Go. Las gaseosas y cervezas salieron del descongelamiento de precios en enero, después de varios meses sin movimientos en sus precios y los empresarios comenzaron a ajustarlos.
“Vemos que la inflación de marzo superará el 4%“, aseguró Guido Lorenzo, economista director de la consultora LCG. Los economistas más optimistas consideran que en abril comenzará a desacelerarse la inflación, en línea con la promesa del Gobierno de que llegue al 2% -única forma de acercarse a la meta de 29% del presupuesto-, pero a la vez sostienen que por la inercia inflacionaria no bajará del 3%.
“Me gustaría que podamos alejar la lupa y pensar que si este mismo diálogo hubiese sido hace unos 10 años, estaríamos hablando del problema de la inflación del 20% anual. Ahora naturalizamos un 3% mensual como piso, que significa un 43% anual. Los datos de marzo y abril son coyunturales, el problema es convivir con estos niveles todos los meses”, detalló Lorenzo, además docente en la Universidad de Buenos Aires.
Otras subas importantes que se registraron en marzo fueron el pan fresco, con un aumento de casi el 10%, por lo que encabeza los incrementos de los productos frescos y lo siguen la suba en pescados y achuras con un valor cerca el 9%. Que se suman al alza en los servicios de educación de entre un 15% y 25%, en la medicina privada del 3,5%, la suba de combustibles un 5%, de taxis y de subtes.
