Hace un año, Elon Musk anunciaba el inicio de la construcción de la Gigafactory 4, la magafábrica de Tesla Berlín- Brandeburgo. Ese fue el inicio de una saga de conflictos con organizaciones ambientales, alertadas por los planes para talar miles de árboles y utilizar importantes cantidades de agua en los bosques que rodean el sudeste de la capital alemana. Detrás del proyecto, una idea ambiciosa e imparable: instalar un gigante para producir hasta dos millones de vehículos eléctricos por año.

El predio está enclavado en una plantación de pinos de 300 hectáreas, y para levantar la planta automotriz es necesario talar más de la mitad. Allí, en la época del muro, funcionó un galpón en el que la temible Stasi, la agencia de inteligencia de del lado oriental, almacenaba paquetes que eran confiscados en su camino a la zona occidental. Tiempo después, la zona fue designada como área industrial pero solo llegaron allí pequeñas empresas, por eso el trámite rápido del plan de obras de Tesla despertó entusiasmo en políticos y habitantes, y también sospechas, en una zona castigada por el desempleo.

El frondoso bosque de pinos donde se está instalando la megafábrica.

El frondoso bosque de pinos donde se está instalando la megafábrica.

El ministro presidente del estado de Brandeburgo, Dietmar Woidke, lo definió como “el mayor proyecto de inversión privada en Alemania Oriental desde la reunificación y probablemente también una de las mayores inversiones industriales en el país en los últimos 40 a 50 años”. Y aseguró que se trata de un caso de “la industria del futuro, en gran medida climáticamente neutral”.

Pero la organización ambientalista Liga Verde exigió a la justicia investigar el impacto ambiental de la Gigafactory, se realizaron protestas y todo estuvo en suspenso hasta que finalmente el proyecto se aprobó explicando que “la tala solicitada en un área designada como industrial no es objetable legalmente”.

Aun así Tesla se comprometió a cumplir ciertos requisitos, como evitar la tala de árboles en la temporada en que las aves empollan o trasladar, sin causarles daños, a más de un millón de hormigas de cinco hormigueros encontrados en el terreno. También a mudar murciélagos, reptiles y otros insectos y animales pequeños en peligro.

El plan original es comenzar a producir en 2021.

El plan original es comenzar a producir en 2021.

Además, con cada “limpieza” a medida que avanza el proyecto de construcción deberá hacer nuevas plantaciones en una proporción de 1: 1. Tesla debió acordar la reforestación del área y en lugar del bosque exclusivo de pinos se creará un bosque mixto con distintos tipos de especies para preservar la biodiversidad y protegerlo a largo plazo.

La empresa asegura que la fábrica, ubicada estratégicamente cerca del nuevo aeropuerto internacional de Berlín, “será un entorno de trabajo ideal con características modernas y sostenibles”. En la primera etapa de expansión, quiere crear hasta 3.000 puestos laborales y hasta 12.000 empleados trabajando en turnos que viajarán a la planta todos los días, un enorme crecimiento en el volumen de tráfico para el que ampliará la estación regional con más conexiones de trenes y micros, estacionamientos adicionales y hasta la construcción de una autopista para bicicletas.

Para teñir todo un poco más de “verde”, su producción se alimentará de paneles solares ubicados en los techos y los materiales serán trasladados por su camión totalmente eléctrico, el Semi. Aunque todavía existen incógnitas sobre cómo manejará el consumo de agua y el tratamiento de las aguas residuales en las sucesivas ampliaciones de la megafábrica (cada etapa de expansión necesitará de un nuevo procedimiento de revisión y aprobación).

El uso del agua es una de las mayores preocupaciones ambientales.

El uso del agua es una de las mayores preocupaciones ambientales.

Mientras tanto, un año después el plan avanza a toda velocidad. Hace días se puso en funcionamiento la grúa puente para la instalación de las máquinas de fundición y la oficina estatal de medio ambiente otorgó nuevos permisos de obra, al mismo tiempo que se construye el esqueleto de acero del techo que conectará los diferentes sectores.

Un emprendimiento anunciado por la compañía como “la planta de producción de vehículos eléctricos a gran escala más avanzada del mundo” en la que aplicará los últimos adelantos en métodos de fabricación, los sistemas de baterías más potentes, nuevos mecanismo de fundición y un revolucionario proceso de aplicación de pintura. El cuarto eslabón de una serie iniciada con la Gigafactory 1 de baterías de iones de litio, seguida por la G2 de paneles solares (ambas en EEUU) y continuada con la G3, que produce el Tesla Model en Shanghái.​

Tesla quiere consolidar su posición en el mercado de los autos eléctricos.

Tesla quiere consolidar su posición en el mercado de los autos eléctricos.

La Liga Verde advirtió que observará con atención cada paso para verificar que se cumplan las exigencias ambientales, mientras las obras en las hectáreas de bosques cercenadas avanzan. Por estas horas, y pese a las restricciones que impone la pandemia de coronavirus, se desplazan sin respiro grúas y una flota de camiones y semirremolques con decenas de pilares de hormigón que están edificando uno de los grandes sueños de Musk: tener listo en 2021 un coloso capaz de producir entre 500 mil y hasta dos millones de vehículos por año, con el que sacar una ventaja indescontable en el mercado de los autos eléctricos.